La Fundación por los Derechos del Consumidor (FUNDECOM), entiende que ante la grave sequía que afecta al país y la dramática disminución de las reservas de los acuíferos por la falta de lluvia, se hace necesario que tanto la CORPORACIÓN DEL ACUEDUCTO Y ALCANTARILLADO DE SANTO DOMINGO (CAASD), como los demás acueductos del país, racionen en forma justa la distribución de agua en los diversos sectores, que obliguen a todo el que use mangueras a colocarles pistones y que se pare el riego de jardines y lavado de aceras que producen un uso no prioritario del agua.
La organización de defensa de los derechos de consumidores y usuarios entiende que la CAASD, CORASAN, CORAMOCA y CORAPLATA, así como el INAPA y otras instituciones similares, deben insistir en corregir los escapes de agua que se producen en las diversas ciudades del país, puesto que por esa vía se pierden millones de litros de agua que van a parar a las cloacas sin reportar ningún servicio a la sociedad.
FUNDECOM recordó que el artículo 15 de la Constitución dice que el agua es un patrimonio nacional estratégico de uso público, inalienable, imprescriptible, inembargable y esencial para la vida, teniendo el consumo humano de la misma prioridad sobre cualquier otro uso, debiendo el Estado implementar políticas efectivas para la protección de los recursos hídricos de la Nación.
En los últimos meses se ha registrado reclamos de las diversas poblaciones por la escasez de agua, el costo de cada tanque y camión que deben comprar para satisfacer necesidades elementales de baño y aseo, cocinado, lavado de las viviendas, cocción de los alimentos y demás usos, para lo que deben pagar sumas apreciables para una población de escasos recursos económicos, mientras las facturas llegan cada mes como si el servicio se prestara en forma normal. Lo cual constituye una forma de despojo en perjuicio de la economía popular.
FUNDECOM concluyó llamando a las autoridades que regulan en agua en el país, a tomar medidas más efectivas para enfrentar la escasez de agua, educar más a la población sobre la forma de economizar el preciado líquido y reglamentar el uso de mangueras en todo el país, las cuales deben tener colocados pistones que reduzcan el desperdicio de agua, así como organizar planes efectivos y constantes contra los escapes de agua en las calles y viviendas debido a un mal manejo del recurso agua.
En la ciudad de Santo Domingo, Distrito Nacional, capital de la República Dominicana, a los 16 días del mes de septiembre de 2019.
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